Maestros de la Espada de Hoeth

"Desde la oscuridad lloro por vos. Las lágrimas que derramasteis por nos son la sangre de la estirpe de los Elfos. ¡Oh Isha! Aquí me alzo en la última costa con una espada en mi mano. Ulthuan no caerá jamás."

—Lema de los Maestros de la Espada de Hoeth.

Existen muchas formas de viajar por la senda de la sabiduría. Algunas son rápidas y solo requieren unos años de meditación, otras requieren del arduo estudio de oscuros volúmenes arcanos y, para unos pocos, el verdadero camino radica en la disciplina marcial. Estos son los Maestros de la Espada, aunque no solo son expertos en el manejo de tal arma, sino que también aprenden a luchar con la fuerza de sus manos o con cualquier arma que esté a su alcance, especialmente si se trata de sus bien equilibradas y finas espadas a dos manos ceremoniales, con las cuales entrenan constantemente buscando la perfección en cada movimiento de ataque y contraataque

Descripción[]

El lugar central de su culto es la Torre Blanca de Hoeth, en el corazón de la ancestral Saphery. Allí estudian técnicas secretas de combate que les permiten potenciar sus cuerpos y sus conocimientos hasta niveles increíbles. Dedicando su vida a templarse en el arte de la guerra durante décadas, incluso siglos. Algunos dicen que son capaces de cortar una vela por la mitad sin alterar su llama; otros hablan de que pueden luchar en la más completa oscuridad guiándose únicamente por el sonido de la respiración de su enemigo, o que pueden matar a un enemigo con un mero roce y matar mientras emiten un solo silbido.

Estos hábiles guerreros son los Guardianes de la Torre Blanca y protegen a los magos y sabios que viven y estudian allí. Pero los Maestros de la Espada no son ermitaños. Una parte de sus deberes consiste en servir como mensajeros de los maestros que habitan en la Torre Blanca, viajar por todo Ulthuan, acompañar y proteger a los sabios en sus viajes o buscar información que sirva para enriquecer la amplia colección de volúmenes que se guarda en la Torre Blanca.

Cuando Ulthuan marcha a la guerra, son los más entusiastas porque es al servicio del Rey Fénix cuando dan rienda suelta a su arte mortal al máximo. A medida que avanzan, las hojas de sus espadas se difuminan y serpentean, golpeando a las flechas en pleno vuelo y dejando rastros de sangre allí donde el acero forjado de Hoeth golpea la carne. Enfrentarse a ellos es un gran desafío, pues resultan oponentes letales, dispuestos a practicar los conocimientos aprendidos sobre enemigos reales, de manera que en un combate contra ellos no hay opción para una segunda oportunidad. Se trata del examen donde prueban su valor y que, por ello, buscan con avidez.

Maestros de la Espada por Rick Sardinha Altos Elfos

Desde el comienzo del reinado de Bel-Korhadris el Rey Sabio, los Maestros de la Espada se han distinguido en miles de ocasiones. En la Batalla del Vado Hathar, un solo regimiento de Maestros de la Espada protegió el único paso del río en kilómetros a la redonda. Al mando de unos temidos hechiceros, el Consejo de los Diez, un enorme ejército de Elfos Oscuros trató de atravesar el río, pero los Maestros de la Espada se lo impedían una y otra vez. Luchando con una rodilla apoyada en el suelo del río, los Maestros de la Espada causaron muchas bajas a los Elfos Oscuros, a pesar de la barrera de hechizos lanzada por el Consejo de Brujos.

Tras horas de combate incesante, el río quedó inundado de cadáveres de Elfos Oscuros que después iban a amontonarse en sus orillas. La oportuna llegada del legendario Mago Teclis al campo de batalla les dio un respiro tras el asalto mágico lanzado por el Consejo de los Diez y los Maestros de la Espada aprovecharon para contraatacar rápidamente y expulsaron a los Elfos Oscuros del campo de batalla.

La Guerra Secreta[]

Desde la época de Bel Shanaar el Explorador se ha desencadenado una lucha larga y amarga bajo la apariencia pacífica de las cortes y palacios de Ulthuan. Es una guerra que se produce tras puertas cerradas entre los agentes fieles del Rey Fénix y los degradados adoradores de los cultos a los excesos.

Tras siglos de amarga lucha, el Rey Fénix Aethis el Poeta pidió ayuda a los sabios de la Torre Blanca de Hoeth. Como respuesta, los Señores del Conocimiento enviaron a los Maestros de la Espada de Hoeth sobre los viles cultistas. Los soldados guerreros legendarios no desperdiciaron el tiempo y mostraron toda su habilidad en combate hasta en las esquinas más oscuras de las grandes ciudades de Ulthuan, matando a los cultistas allá donde los encontraban.

Y así empezó el primer capítulo en la guerra secreta que ha durado desde entonces, pues los Maestros de la Espada son enemigos implacables y no descansarán hasta el día en que no quede con vida un solo miembro del Culto al Placer.