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Este artículo contiene información de Warhammer: The End Times - Vermintide
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Llevando sus distintivas túnicas y máscaras de gas y portando un pesado respirador, los Lanzadores de Viento Envenenado se han atado con correas una bomba de relojería a sus espaldas, ya que el contenedor está lleno de un gas de disformidad altamente inflamable. Estos soldados a sueldo de élite pueden ser escuchados desde una gran distancia, chirriando y jadeando hacia la batalla mientras preparan sus esferas con el verdoso gas mortífero para ser arrojado a su enemigo.
Tras el impacto, la esfera se rompe y se propagan los vapores tóxicos, aturdiendo y dañando a cualquiera que pudiera quedar atrapado en la nube resultante. La vida es barata a los ojos de los Skaven, y al Lanzador de Viento Envenenado no le importa si las Ratas de Clan quedan atrapadas dentro de la nube junto con el objetivo enemigo.
Si nuestros héroes consiguen causar un fuerte daño al Lanzador de Viento Envenenado, entrará en un frenesí en el mismo momento que su aparato sea dañado y se vuelva inestable. Entonces el Lanzador de Viento Envenenado cargará contra los jugadores en un intento suicida de matarlos. Si no logran matarlo a tiempo, el Lanzador de Viento Envenenado y su equipo estallarán en mitad de ellos.
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