"Según mis cálculos, tendríamos que ajustar nuestro rumbo a estribor diez grados. Haz lo que quieras, pero no te quejes cuando perdamos el próximo puerto."
- —Navegante anónimo.
Los Navegantes tienen la responsabilidad vital de hacer que un barco llegue a donde debe, por lo que es un miembro muy importante en la tripulación de un barco. Los navegantes del Viejo Mundo suelen usar mapas para fijar su rumbo, aunque a menudo son capaces de navegar consultando únicamente la posición del sol y las estrellas, de esta forma se asegurarse de que el barco está donde debería y en la dirección correcta. Los navegantes conocen los secretos del viento y la marea, lo cual les confiere una aureola mítica entre los marineros, y por lo que a menudo se les distingue de ellos.
Los navegantes suelen llevar una serie de mapas y gráficos de los lugares que han visitado o planean ir. Los navegantes utilizan muchos instrumentos de precisión, como telescopios portátiles, sextantes de latón, brújulas y astrolabios.
Descripción[]
El mundo conocido es un lugar enorme, y gran parte de él aún no ha sido cartografiado o explorado adecuadamente por los hombres del Viejo Mundo. Algunas de las personas más intrépidas buscan explorar las regiones desconocidas del mundo. La gente común cuenta historias de audaces aventureros que han regresado de tierras lejanas con suficiente oro como para vivir en el lujo por el resto de sus vidas. Minimizan el hecho de que la mayoría de estos exploradores desaparecen en lugares desconocido, para no ser vistos nunca más.
Los navegantes son buscados para acompañar las expediciones. Son principalmente requeridos por aquellos que desean viajar por mar, ya que, como apenas hay brújulas en el mundo, el sol y las estrellas proporcionan los únicos puntos de referencia confiables en medio del océano, por eso todos los barcos cuentan con un navegante.
Sin embargo, no todos se hacen a la mar, sus habilidades también son útiles en tierra, y a veces son empleados por partidas de exploración o de comercio que han de adentrarse en territorio desconocido, ya que por sus habilidades los navegantes son necesariamente cartógrafos, pues deben trazar en un mapa las rutas de sus viajes para poder regresar o para que otros puedan seguirlas. Algunos de ellos se unen a las caravanas de mercaderes que recorren los interminables kilómetros de la Ruta de la Seda hasta la lejana Catai, o buscan comerciar con mercaderes en las Tierras del Sur, ricas en oro y marfil.
Muchos navegantes aprenden su oficio a través de la experiencia práctica. Es posible que hayan trabajado en las rutas comerciales desde una posición más humilde, como porteadores o muleros, y hayan aprendido a usar herramientas y métodos de navegación de los navegantes en su compañía.
Otros navegantes son lo suficientemente ricos como para evitar un aprendizaje tan arduo y estudian la teoría de trazar rutas observando las estrellas en una de las universidades del Viejo Mundo. Muchos navegantes se unen al Gremio de Exploradores, un club con sede en la Universidad de Altdorf.
Afiliaciones[]
La navegación es una ocupación solitaria: durante el viaje, la mayoría de los marineros no se acercan a los navegantes, temerosos de distraerlos y arriesgar la seguridad del barco. Quizás debido a esto, cuando están en tierra, los navegantes buscan a sus compañeros de oficio lo antes posible, disfrutando de la camaradería siempre que esté disponible. Esta inclinación también hace que los navegantes se muestren ansiosos por unirse a cualquier organización adecuada, ya que estos grupos les brindan una buena oportunidad para reunirse y conocer a personas de ideas afines.
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Curiosidades[]
- En la primera edición, de Warhammer Fantasía el Juego de Rol, esta carrera (en ingles Navigator) fue traducida como Piloto.
Fuentes[]
- Warhammer Fantasy JdR 1ª Edición, pág. 102.
- Warhammer Fantasy JdR 2ª Edición, pág. 81.
- Warhammer Fantasy JdR: Career Compendium (2ª Ed. Rol), pág. 151.
- Warhammer Fantasy JdR: Player's Guide (3ª Ed. Rol), pág. 153.