Kouran Manoscura se aseguró su lugar en la infamia cuando lideró a una hueste de la Guardia Negra contra Tor Anroc, capital del reino de Tiranoc. El profundo odio que siente hacia esa ciudad se debe a ser el lugar de nacimiento de su odiado Bel Shanaar.
La Guardia Negra atacó por la noche, precedida por un grupo de Sombras que se había encargado de despachar a las patrullas y centinelas. Pasando desapercibidos, los guerreros de la Torre del Dolor siguieron la carretera en espiral que conducía al centro de la ciudad. Atacaron por sorpresa, matando a los guardias y abriéndose camino hasta el palacio opulento. Quemaron todos los tapices, retratos y ornamentos que se encontraron allí, ya que la Guardia Negra seguía órdenes exactas de su maestro. Los guerreros de Kouran acabaron con toda oposición y después apilaron los cadáveres de sus víctimas en la plaza delante del palacio.
Cuando los primeros rayos del amanecer se fundieron con la llamas de la ciudadela, la Guardia Negra abandonó la ciudad. El amanecer reveló una nueva atrocidad, pues los cadáveres de los enemigos fueron colocados formando una de las runas de Khaine, para dedicar los espíritus de los que se marchaban al Dios del Asesinato.
Fuente[]
- Ejércitos Warhammer: Elfos Oscuros (7ª Edición).