Carro de Cadáveres

Cuando Vlad arrojó los ejércitos de Sylvania sobre el Imperio, entre la multitud de zombis y las filas de esqueletos podía distinguirse a los repugnantes Carros de Cadáveres. Conducidos por figuras macabras y envueltas en sudarios, estos carros estaban hechos de madera podrida, metal herrumbroso y carne putrefacta amontonada retorcida con partes del cuerpo. Unas manos con garras sobresalen del Carro de Cadáveres e intentan atrapar a todo el que está próximo.

Este carro permite a los Condes Vampiro hacer uso de cadáveres para dañar o crear más zombis. Además, este carro recibe una gran protección de la carne que se pudre dentro de el, ya que su construcción en sí no es muy solida.

Descripción[]

El Carro de Cadáveres actúa corno un imán para la Magia Oscura, atrayendo todo su poder de la tierra y el aire y animando a los muertos a su alrededor. A veces, el Carro de Cadáveres lleva colgada una gran campana con un badajo de piedra bruja pura. Cuando la magia nigromántica se lanza sobre el Carro de Cadáveres, la campana tañe amenazante y ondas de Magia Oscura se extienden a su alrededor. Bajo la influencia de esta campana fúnebre mística, los muertos se unen y los cadáveres se ponen en pie.

En algunas ocasiones, se han visto Carros de Cadáveres con braseros en los que arden llamas oscuras. El humo de este fuego funesto contiene partículas de piedra bruja que interfieren con los Vientos de la Magia y enloquecen a los hechiceros enemigos de los Condes Vampiro.

Aquellos que se atrevan a atacar a este portador de cadáveres, se encontrarán asaltados por la multitud de manos que sobresalen del carro y trataran de agarrarles. Las diferentes extremidades carecen de la fuerza de la vida, pero el gran número que hay suele ser más que suficiente para ganar. Algunos enemigos desafortunados incluso podrían verse atacados por el conductor Nigromante, con nefastos resultados.

Estos extraños constructos son muy valorados por los Vampiros, porque la presencia del carro tiene algunos efectos extraños en las criaturas No Muertas que estén en las inmediaciones, parece que de alguna manera se ven imbuidas de un vigor frenético, reforzando la línea de batalla del ejército de un Conde Vampiro, por lo que generalmente los lentos esqueletos atacarán más rápido que los Elfos; conocidos por sus rápidas reacciones. Aún lo más preocupante de los carros es que muchos parecen tener magnetita profana, mineral que amplifica el proceso de levantar muertos vivientes.

Orígenes[]

Aunque Vlad usó el poder del Carro de Cadáveres, no fue el primer Conde Vampiro que los creó. En el Geheimnisnacht del año 1.111, Morrslieb descargó sobre la tierra de Sylvania meteoros enormes y legiones de víctimas de la plaga ennegrecidas se alzaron de sus tumbas con su carne aún llena de pústulas y quemada. Los fragmentos de piedra bruja también afectaron a los carros de plaga que transportaban a miles de muertos a los osarios. Los cuerpos se unieron entre sí componiendo masas retorcidas de criaturas No Muertas y los conductores de los carros se convirtieron en criaturas extrañas y deformes.

El infame nigromante Frederick Vanhal formó un ejército de No Muertos con las legiones tambaleantes de los recién levantados y usó sus conocimientos de la Magia Oscura para unir el carro a su voluntad. Gracias a la piedra bruja y al genio diabólico de Vanhal, el carro de cadáveres actuó como un foco de la magia nigromántica. Cuando el aprendiz de Vanhal lo mató, los Carros de Cadáveres no podían ser controlados. Sin la guía de Vanhal, los carros desaparecieron. Aunque la mayoría fueron perseguidos y quemados, durante más de mil años han vagado por carreteras secundarias y caminos sucios de Sylvania, llevando muerte y miseria como si fueran un sudado. En las noches oscuras entran en las aldeas, despertando a los muertos en sus tumbas y contaminando los sueños de los campesinos durmientes con pesadillas de muerte y putrefacción.

Construcciones semejantes a estos carros se encontraron en la ciudad maldita de Mousillon, aunque no se sabe con certeza si son auténticos Carros de Cadáveres. Según cl folklore, existen unos carros macabros de los que cuelgan tiras de piel de colores brillantes, conocidos como los carromatos. Las canciones morbosas de Bretonia relatan la historia de mortales a los que un carromato extrae la vida y sus cadáveres trepan a bordo para unirse a la procesión eterna que surca la noche mientras el Capataz busca la muerte en las hogueras de la batalla.