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Miembro clan Moulder

Imagen ilustrativa

Izak Grottle es un Señor de las Bestias Skaven del Clan Moulder conocido por ser monstruosamente obeso, y ser un maestro en la cría de bestias mas feroces como crear muebles vivientes con sus sujetos de experimentación.

Descripción[]

Izak Grottle es uno de los miembros más competentes del clan, experto a la hora de trazar planes basados en las mejores cualidades del Clan Moulder: la transformación de criaturas en voraces monstruos, el entrenamiento de dichos monstruos en salvajes máquinas de guerra, y el empleo de dichas máquinas contra los enemigos de los Skavens. Igualmente, también es uno de los más dementes, pues es conocido porque muchos de sus sujetos de experimentación terminan sus vidas como muebles grotescos con vida tras sufrir las modificaciones más horribles y absolutas a sus manos.

Debido a su mórbida obesidad, Izak Grottle suele viajar en un palanquín tirado por esclavos. La razón de su corpulencia es debido a que suele sufrir frecuentes retortijones a causa del Hambre Negra, la imperiosa necesidad de comer que sienten los Skavens tras realizar grandes esfuerzos físicos. Sin embargo, en su caso, los efectos del Hambre Negra están a un nivel mucho mayor, probablemente por la permanente exposición al polvo de piedra de disformidad y los químicos mutadores, por lo que debe comer constantemente. Para el propio Grottle, esta hambre insaciable no es más que una prueba irrefutable de su enorme inteligencia; pues tiene que comer mucho para alimentar su increíble mente.

Este apetito hace que siempre lleve consigo enormes montones de carne seca, a la que echa mano cuando se ve invadido por el hambre. Como come constantemente, las provisiones no tardan en desaparecer, así que no duda en devorar a sus propios lacayos al menor error o disgusto. Esto ha provocado que se extienda entre sus subordinados y adversarios toda una serie de truculentos rumores sobre él y su sangrienta voracidad, como que le gusta comerse las entrañas de sus enemigos ante los propios ojos de éstos cuando aún estaban con vida. A Izak Grottle siempre le complace decirles a todas sus alimañas de investigación que todas esas habladurías son la más pura verdad.

Cuando marcha a la guerra en nombre del Clan Moulder, Izak Grottle suele ir en un palanquín llevado por Ratas Ogros, y acompañado por una monstruosa guardia formada por dichas bestias, todas especialmente entrenadas por él, a las que trata con primor y recompensa para que le sean leales. Con semejantes guardaespaldas no es extraño que sean pocos los Skavens que se atreven a desafiarlo abiertamente.

Historia[]

Plantilla Spoiler Cazador de Brujas
Alto, estás caminando por la senda del Hereje. Si continúas, corres riesgo de... perderte.
Este artículo puede contener spoilers de Mataskavens, Matadragones, Matabestias.

Cuando los Skavens se organizaban para llevar a cabo una invasión y conquistar la ciudad de Nuln, Izak Grottle fue enviado allí para defender los intereses del clan Moulder, que había invertido mucho en esa campaña. Se suponía que aquel enorme ejercito de Hombres Rata debería estar liderado por el Señor de la Guerra Vermek Skab, del clan Skab, pero tras su muerte “accidental”, Izak trató de asumir el mando del ejercito, algo a lo que se oponían Heskit Un Ojo y Caldovil Inválido, representantes del Clan Skryre y Pestilens respectivamente.

Antes de que la situación se descontrolara, el Vidente Gris Thanquol les recordó que él había sido puesto al mando del ejercito por edicto del Consejo de los Trece antes de la asignación de Vermek, pero como este ya no estaba entre los vivos, el edicto seguía vigente y por lo tanto continuaba al mando. Los tres líderes tuvieron que aceptar la situación, pero cada quería conquistar Nuln para gloria de su clan, y por supuesto la suya propia.

Izak Grottle se retiró a una madriguera secreta que tenía en Nuln, donde había desarrollado una nueva variedad de Ratas de corta vida pero de gran capacidad reproductiva y voracidad, desarrolladas para que devorasen toda la comida de la superficie y, una vez hecho esto, la hambruna las empujaran a atacar a los habitantes humanos de la ciudad, hasta que fueran destruidos u obligados a huir. El ciclo de vida de vida de las ratas había sido calculada para que todas acabaran muriendo a las pocas semanas, dejando vía libre a los conquistadores Skavens tras causar graves estragos en al superficie. Cuando estuvo todo listo, Grottle ordenó a unos pocos subalternos que soltaran estas ratas en los graneros y almacenes de la ciudad.

Por desgracia para el Señor de las Bestias, el Vidente Gris Thanquol tuvo conocimiento de su plan gracias a su espía Acechador Lenguadelatora, y no estaba dispuesto a permitir que nadie le arrebatase la gloría de conquistar Nuln. Con anterioridad ya había echo fracasar los respectivos planes de Heskit Un Ojo y Caldovil Inválido, a base de advertir a sus dos mortales enemigos Gotrek Gurnisson y Félix Jaeger de forma anónima.

Cómo el Vidente Gris esperaba, la pareja de aventureros hicieron fracasar los planes de Grottle, aunque unas pocas ratas sobrevivieron, causando problemas tanto en los humanos (pero mucho menos destructiva de lo planeado) y sobre todo a los propios Skavens. Izak Grottle estaba furioso por lo acontecido, pero mas furioso se quedó cuando descubrió el responsable de aquello días después.

El Sacerdote de Plaga Caldovil Inválido había capturado a Acechador Lenguadelatora, e invitó a él y Hestik para interrogarlo entre los tres. Acechador confesó que el Vidente Gris Thanquol fue el responsable de hacer fracasar de sus planes. Furiosos, consideraron la idea de asesinar a Thanquol, y por sugerencia de un aterrado Acechador, decidieron emplear la misma táctica que Thanquol uso contra ellos: enviar un mensaje a Gotrek y a Félix.

Días mas tarde, Thanquol reunió a todo a su ejército para anunciar que pronto dará comienzo la invasión de Nuln, repartiendo los planes a cada unidad. Grottle, Caldovil y Heskit le interrumpieron constantemente al preguntarles sobre sus planes, y el Vidente Gris anuncia que mientras las fuerzas Skavens atacan la ciudad, él lideraría un pequeño grupo que asaltará el palacio para capturar a los principales líderes de Nuln. Los tres lideres se ofrecen a ser uno ellos quien lleve a cabo la misión, pero Thanquol se lo niega, pues sabe que aquella acción será lo que reporte mas gloria y prestigio una vez conquistada la ciudad.

Concluida la reunión Thanquol hace llamar a Acechador. Irritado por las interrupciones de Grottle, Caldovil y Heskit y sus intentos por menoscabarlo, a decidido que ya era hora de eliminarlos, y para ello había asignado a los tres atacar una zona muy concreta de la ciudad, muy cerca de donde residían Gotrek y Félix, y para que funcione tienen que enviarles un nuevo mensaje para advertir al par de héroes.

Sin embargo, cuando se disponía a cumplir con la misión, Izak Grottle se encuentra con Acechador y le pregunta que está haciendo. Acechador miente asegurándole que lo estaba buscando y le habla de las intenciones del Vidente Gris. Izak Grottle se deshace del mensaje y le da uno nuevo en el que advierte a Gotrek y a Félix de los planes de Thanquol por capturar a los líderes de la ciudad.

Grottle está al lado de Acechador en todo momento hasta que debe salir a ala superficie. Acechador hace entrega del mensaje de los tres conspiradores, pero tiene la mala suerte de ser visto por Félix, quien le persigue hasta la alcantarilla de la que salió. Alarmados por el pánico de Acechador, los skavens que estaban aguardando salen en tromba y empiezan atacar la ciudad prematuramente, obligando a Félix a escapar y avisar a todos del ataque de los Skavens.

Liderando un grupo de mercenarios y ciudadanos, los dos héroes acaban con muchos hombres rata, entre ellos las ratas ogro que Izak Grottle había traído consigo. El señor de las Bestias le pregunta enojado a Acechador si entregó a los dos héroes, y el le asegura que si, pero que él no es responsable de que se vieran atrapados en la refriega. Sabiendo que poco mas podría hacer allí, Izak Grottle decide retirarse de vuelta a las madrigueras, dejando al resto de miembros del ejercito Skaven a su suerte.

La batalla de Nuln, que terminó en derrota para los Skavens. Heskit Un Ojo y Caldovil Inválido cayeron durante la refriega, y gracias al mensaje que le entregaron a Gotrek y Félix, estos hicieron fracasar los planes de Thanquol, quien se vio obligado a huir. Izak Grottle regresó al Pozo Infernal, pero debido al desastre de Nuln, cayó en desgracia ante los ojos de los Señores del Clan Moulder, perdiendo mucha de su influencia y prestigio.

Izak volvería a reencontrarse con Thanquol y Acechador meses después. El Vidente Gris quería apoderarse de una máquina voladora que los enanos habían creado e hizo que Acechador se infiltrara en la nave antes de que partiera a una misión a los Desiertos del Caos. Thanquol pactó una alianza con el clan Moulder para que le prestaran varios centenares de guerreros así como numerosas bestias de guerra a cambio de repartir el botín del éxito, algo que el Vidente Gris tuvo que aceptar a regañadientes.

El ejército Skaven esperó el regreso de la nave voladora para capturarla, pero fueron derrotados, y los supervivientes se dispersaron, entre ellos Thanquol y un muy cambiado Acechador, debido a las energías disformes de los desiertos. Tras vagar durante varias semanas, Thanquol y Acechador regresaron al Pozo Infernal.

Mientras el mutado Acechador fue llevado por a los laboratorios de la madriguera, Thanquol fue llevado a una sala para ser interrogado. Debido a perdida de poder e influencia dentro del Clan, Izak Grottle fue enviado a entrevistar al Vidente Gris, exigiéndole explicaciones por su fracaso a al hora de capturar la nave aérea y la perdida del pequeño ejercito que el Clan Moulder le había prestado.

Grottle disfrutaba de la precaria situación en al que se encontraba el Vidente Gris y de la excusas que soltaba para no considerarse responsable de aquel fracaso, pero pronto Thanquol cambió el tema de la conversación cuando le informó que durante sus días de vagabundeo fue testigo de la inminente invasión de un gran horda del Caos a los reinos humanos del sur, exigiendo que el Consejo de los Trece fuera informado de inmediato, para actuar en consecuencia. Sin apenas darle importancia a esto, Grottle le aseguró que informaría a sus superiores, y de forma indirecta también le dijo que era prisionero del Clan Moulder.

La situación no mejora para Thanquol cuando su antiguo subalterno Acechador logró escapar y organizó una revuelta de esclavos por todo Pozo Infernal que los Moulder apenas pueden controlar. Izak Grottle acusa a Thanquol del ser el responsable, o al menos, participe, de los últimos desastres que habian acontecido al clan Moulder. La cosa hubiese acabado mal para el Vidente Gris si los desesperados ancianos del clan no le hubiesen pedido su ayuda para frenar la revuelta.

Gracias a su poderes, tras varias semanas, la rebelión es sofocada, aunque Acechador había logrado escapar. Por su ayuda, el Vidente Gris quedó libre de toda acusación y se le comunicó que partiera de inmediato a Plagaskaven para que explicara sus últimas acciones ante el Consejo, proporcionándole una escolta de unos pocos millares de guerreros para el viaje, siendo Izak Grottle asignado como su segundo al mando.

Por el camino van derrotando a pequeñas partidas de guerra del Caos. La fuerza de Thanquol pasó cerca de la ciudad de Praag, que estaba siendo asediada por la enorme hueste del caos, atraído por grandes cantidades de energías del Caos que los brujos de la horda que habían acumulado para sus rituales con los que atacar la ciudad. El Vidente Gris incluso usó una proyección astral para contemplar el asedio.

Por desgracia, varios campeones del caos habían tenido noticias de la presencia de un ejército skaven y decidieron ir a por ellos. El desesperado Izak Grottle tardó un tiempo en sacar al Vidente Gris de su trance e informarle de la inminente amenaza. Thanquol rápidamente reorganizó sus fuerzas, y aun discutiendo con Izak Grottle en los aspectos estratégicos, los Skavens lograron derrotar a los guerreros del Caos, observando poco después como la Gran horda del Caos era derrotada en Praag y se dispersaba.

Después de la batalla, Thanquol se despidió del clan Moulder, de Pozo Infernal y de Izak Grottle, quedándose con un pequeño grupo de esclavos para que lo llevasen a Plagaskaven. Por su parte Izak Grottle regresó a Pozo Infernal, donde continuó llevando a cabo sus dementes experimentos.

Fuentes[]

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