Imagen ilustrativa
Las muchas zonas volcánicas y geotérmicas del Imperio Subterráneo están habitadas por una gran variedad de criaturas extrañas y maravillosas. Una de estas bestias es el cazador de manada conocido como lagartomandra, un lagarto de fuego del tamaño de un perro que cambia el color de sus escamas para fundirse con sus alrededores. Los lagartomandras son reptiles de sangre caliente que prosperan en el calor extremo. Cuando cazan dejan sus guaridas, pero no son capaces de sobrevivir más de un día o dos en el relativo frío del Imperio Subterráneo.
Las lagartomandras crecen hasta alcanzar una longitud de un metro veinte centímetros, y a la altura de los hombros miden unos sesenta centímetros. Sus escamas puntiagudas tienen un color natural marrón rojizo, pero pueden cambiar el color de su piel a voluntad, de forma similar a un camaleón. Las lagartomandras también exhalan ráfagas de aire supercaliente de sus bocas, incluso mientras atrapan y enredan a sus contrincantes con sus lenguas gomosas y elásticas.
Fuente[]
- Warhammer Fantasy JdR: Hijos de la Rata Cornuda (2ª Ed. Rol), págs. 113-114.