La aldea de Leiderburg (aldea en ruinas en el mapa), formó parte del complejo minero de la Presa Leider y el lago. Aquí vivían humanos y enanos pacíficamente a orillas del lago. Los primeros eran los descendientes de aquellos que perdieron sus hogares cuando el valle fue inundado por los enanos para su construcción.
Los últimos enanos se marcharon hace años, cuando las vetas de oro se agotaron. Los humanos se quedaron viviendo de forma pobre, pescando en el lago y tratando de criar unas cuantas ovejas escuálidas en las colinas.
Pero hace unos pocos años, comenzaron las desapariciones. Primero animales, luego los ñiños. Sin que lo supieran los aldeanos, un joven pulpo de los pantanos había llegado al lugar y se había cansado de su dieta de truchas y lucios. Los últimos cinco habitantes huyeron a Marienburgo dejando sólo ruinas y su destartalada casa.