"Si quieres pescar un Lucio del Stir, tendrás que renunciar a un dedo, pues es lo único que sirve como cebo. ¡Estoy seguro de que a Taal no rechazará esa ofrenda!"
- —Pescador anónimo.
No todos en el Viejo Mundo son heroicos aventureros. Muchos habitantes de zonas costeras y ribereñas se ganan la vida pescando. La de Pescador no es una mala vida, la comida abunda... aunque sea siempre pescado. Pero en los tiempos difíciles, o cuando hace tanto calor que la pesca se pasa antes de llegar al mercado, los Pescadores suelen reunirse en tomo a los muelles y en las posadas portuarias, donde sueñan con hacerse aventureros, marinos, exploradores... y por encima de todo, ricos. Muchos se conforman con soñar, pero hay algunos que emprenden una vida de aventuras en pos de sus ambiciones.
Descripción[]
Los pescadores buscan el tesoro del mar. Las numerosas aldeas costeras de Nordland son el hogar de incontables pescadores. Estas almas sencillas se enfrentan al Mar de las Garras en pequeños barcos, a pesar de la constante amenaza de piratas y saqueadores de Norsca. También hay algunas comunidades pesqueras en tierra firme, junto a lagos y ríos, aunque estas aldeas también se dedican a la agricultura. Como cabría esperar, los pescadores son gente bastante independiente. Trabajan en pequeños grupos, y una vez en alta mar toman sus propias decisiones. Este espíritu enérgico es una de las razones por las que siempre hay altercados en las tabernas de los muelles.
La pesca es difícil de regular, en parte debido a su popularidad entre los pescadores aficionados, pero también debido a la inexactitud de los límites acuáticos. Además, los peces confiscados tienden a estropearse antes de que puedan venderse. Por lo tanto, los pescadores no están representados por gremios en el Viejo Mundo, y esto proporciona un incentivo suficiente para que la gente con mentalidad independiente asuma la profesión. Lo más parecido a un gremio de pescadores es una "asociación pesquera" que se encuentra en muchas ciudades de Estalia. Su principal objetivo es hacer concordar a los tripulantes con los barcos cada mañana, pero a veces la asociación también media en las discrepancias sobre las aguas disputadas.
Los pescadores costeros son madrugadores y arrojan sus redes mucho antes de que salga el sol. Por la tarde, están disfrutando de una pinta de cerveza en la taberna, habiendo vendido su pesca diaria a los ahumaderos y pescaderías de los muelles. Los pescadores del interior tienden a trabajar de forma independiente o con sus familias. En una típica familia de pescadores fluviales, el padre y el hijo mayor pasan el día en el río, las mujeres permanecen en el mercado destripando y vendiendo la pesca, y los hijos menores corren de un lado a otro entregando los peces. Los pescadores de los lagos emplean una mezcla de técnicas costeras y fluviales.
